Por favor, aunque no seáis fans de los Rolling Stones, es estrictamente necesario para la gente que le guste la buena música escuchar el glorioso punteo o riff de la guitarra de Keith Richards en esta canción. Es como si te elevara al cielo y cayeses lentamente flotando sobre unas alas imaginarias. It makes me wonder!

Mucho conozco sobre los Rolling Stones o, más bien, muchos estudios y biografías se han hecho sobre ellos. Incluso hasta una película hace poco, que, para alivio de muchos, no era otro de los miles de documentales de su vida. Ayer compré el último número de la revista Rolling Stone, me llamó la atención el especial de las 100 mejores canciones de los 100 mejores guitarristas (entre ellos Keith Richards), e incluía además, un reportaje sobre el estreno en DVD de la película Shine a light. Mick confesó que no hay más que contar sobre ellos, que su historia está escrita en sus conciertos y en su música. Afirma que ver cómo se tiran a las gruppies, o se drogan o dicen palabrotas no tiene ningún sentido para los que de verdad quieran saber de su vida.

Pues bien, por ahora sólo cuento esto porque ando aburrida en redacción esperando una página. Agosto se nota hasta aquí. Y mientras tanto me he puesto el mp4 y me ha aparecido Gimme Shelter y me he inspirado y he decidido dedicaros esta canción, que se encuentra entre una de mis favoritas, de aquellas que tienen recuerdos para mí. Sin esta canción acompañándome a donde quiera que voy no soy nadie.

Uhm… os dejo con una foto de Brian Jones, el «maldito» de los Rolling Stones. Prometo contaros su historia más adelante.

¡Me voy! Que ya tengo mi página 🙂